Folio giratorio: dinámica de trabajo cooperativo

A mitad de semana tuvimos una clase especial, de esas que disfrutamos todos (alumnos y profe) y de las que sale una con la sonrisa de oreja a oreja y una satisfacción tan grande que no le cabe en el cuerpo. Y es que el miércoles trabajamos una dinámica de metodología de trabajo cooperativo conocida como "el folio giratorio". 

Consiste en combinar el trabajo individual con el trabajo en equipo. Cada alumno tiene un folio con una actividad correspondiente. Debe ir realizándolo hasta que el tiempo estipulado se agote y entonces se lo pasará al siguiente compañero, recibiendo él otro folio con actividades nuevas para realizar. En nuestro caso planteé 6 tipos de actividades diferentes (6 folios giratorios): el folio nº1 consistía en un dibujo en blanco y negro que debían colorear; en el nº2 debían escribir oraciones que hablaran del dibujo; el folio nº3 contenía sumas y restas sin llevadas que debían ir resolviendo; en el folio nº4 debían comparar números y escribir el signo < o > según correspondiera; el nº5 contenía una batería de ejercicios donde debían escribir el número anterior y el posterior a otro dado; y por último, en el folio nº6, tenían que escribir palabras en femenino y palabras en masculino.

Todas las actividades propuestas son contenidos trabajados previamente en el aula y en los que cuales quería hacer hincapié. Podriamos decir que esta dinámica la he utilizado como actividad de repaso de contenidos ya vistos, pero la verdad que puede adaptarse a lo que el maestro quiera, tanto en contenido como en tiempo. En nuestro caso, cada 4 minutos, con la consigna "folio giratorio", paraban de escribir y cambiaban el folio dentro de su equipo en el sentido de las agujas del reloj. Y volvían a dedicarle los 4 minutos siguientes a la nueva actividad. De esta forma todos y cada uno de los alumnos han trabajado todos los contenidos propuestos y al hacerlo en cortos periodos de tiempo, haces que su capacidad de concentración no disminuya. Obviamente no todos los alumnos trabajan al mismo ritmo y en el mismo tiempo igual un niño es capaz de realizar 4 operaciones mientras que otro unicamente ha tenido tiempo para realizar 1. Pero lo importante no es la cantidad de ejercicios a realizar si no el hacerlos bien. Además el hecho de realizarlo en grupo implica el compromiso de hacerlo lo mejor que puedas ya que sabes que el resultado es un resultado común. Si tus compañeros se están esforzando al máximo, ¿cómo no vas a hacerlo tú? 

Otro de los puntos positivos de esta dinámica es el trabajo del autoconcepto y de la autoestima. No a todos se nos dan igual de bien las mismas cosas y este es un buen momento para que cada uno se luzca en lo que mejor se le da, que se sienta útil dentro del grupo aportando su inteligencia en un campo u en otro. Igual sucede con aquellas actividades que no se nos dan del todo bien. El hacerlas en equipo hace que no se bloqueen ante ellas y no se frustren más de lo necesario. Si un alumno se atasca en un ejercicio y solo puede hacerlo hasta la mitad en el tiempo indicado, su compañero de equipo podrá continuarlo y el resultado final será una tarea bien hecha, en equipo, sumando capacidades entre todos. Es como si dijéramos un empuje, un andamiaje que se hacen unos a otros. 

Cuando les planteé la actividad se mostraron muy atentos a la explicación (era algo nuevo y no querían perder detalle) y muy motivados para llevarla a cabo. Yo en principio pensé que igual les costaba entenderlo o que eso de cambiar cada 4 minutos les iba a alterar más que otra cosa. Pero nada de eso. Resulto genial. Durante toda la sesión estuvieron muy concentrados y hasta se regulaban su propia tarea mirando el reloj de la PDI que les indicaba el tiempo que les quedaba. 

Al final les pedí que en grupos dialogaran sobre qué les había parecido esta nueva actividad, cómo se habían sentido trabajando así, si había habido problemas dentro del grupo y en ese caso cómo los habían solventado, etc. Los moderadores se encargaron de controlar que en ese tiempo de charla ninguno de los componentes del equipo hablase en un tono de voz muy alto para no molestar a los demás. Posteriormente fueron los portavoces los que pusieron en común a toda la clase un pequeño resumen de lo que habían hablado en su grupo. 

Desde luego... un súper 10 para todos y todas que lo hicisteis de maravilla. Sin duda lo repetiremos. 

Durante la semana haré fotos a los trabajos de cada grupo y os los pongo para que los veáis.